EL PATRIMONIO ARQUEOLÓGICO

Era el mes de noviembre del año 2018, las clases en la mayoría de instituciones estaban a punto de terminar, tenía grandes expectativas sobre mis notas, esperaba ansioso que terminase el año escolar y pensaba que muchas de las personas que conozco no los vería de nuevo el próximo año. De igual manera, el tiempo pasaba y las expectativas sobre mis notas seguían bastante altas, de hecho, había sido invitado junto a un grupo de personas más a una especie de recorrido a lo largo del parque Arví de Medellín aunque excluyendo a los que tenían notas que recuperar notas definitivas. Ya con mis notas aseguradas, lo único que quedaba era el recorrido por este parque, que consideran, es el parque natural con mayor patrimonio arqueológico de Colombia, sin embargo no especificaron que tipo de parque era, ya que allí se sitúan dos parque recreativos diferentes. A pesar de esto no tenía muchas expectativas sobre el recorrido, no obstante mis amigos y yo teníamos planes variados, entre ellos estaba que alguno de nosotros fuese devorado por un oso de cualquier tipo, por lo demás, nada muy importante que pueda resaltar.

Llega el día quince de noviembre, en el cual nos movilizaríamos hacia el parque Arví a las siete de la mañana, aunque no nos avisaron nada sobre el clima, la vestimenta que debíamos llevar y qué precauciones debíamos tener, de hecho la temperatura del terreno está aproximadamente a quince grados centígrados y se supone que debíamos llevar buen abrigo y calzado cómodo, cosa que no avisaron previamente. En fin, empezamos a movilizarnos, nos dijeron que el viaje tardaría aproximadamente una hora, este no fue tan interesante pero por lo menos pude estar cerca de la ventana del vehículo donde nos transportábamos. Para la mayoría, el viaje no estuvo tan mal, sin embargo, a algunos no les fue bien, ya que tenían nauseas y regurgitaban en algunos casos y aunque solicitasen bolsas, algunas personas no alcanzaban y tenían que hacerlo en otros lugares para tratar de no manchar el vehículo. El viaje termina, todos se quejaban de las bajas temperaturas y algunos estaban pálidos, a la entrada nos recibieron con un desayuno, quizá no era el mejor momento pero la mayoría logró ingerir los alimentos sin problema, mientras tanto, un equipo de sonido reproducía música que para mis amigos y yo no era muy apropiada o directamente era mala. El momento del desayuno termina y empieza el recorrido por el parque natural, lo primero que vemos es la cantidad de lodo que había en el suelo, debido a que había llovido minutos antes allí, y en los primeros minutos nos encontramos un ejemplar de la especie de avispas que fue ingerida por un canino que se encontraba cerca, fue gracioso y a la vez trágico. Seguimos el recorrido y encontramos varias especies de plantas, llegamos a un lugar donde habían mesas de madera y nos dijeron que guardásemos silencio. Después nos dimos cuenta que el recorrido era en círculo, así que volvimos al lugar donde desayunamos, corriendo de manera extraña nos dirigimos a las mesas, a comer un almuerzo y presenciar un espectáculo sobre el cuidado de la naturaleza, donde se nos muestra el cuidado de cada uno de los elementos naturales, en especial el agua, que fue el que mas destacó. Más tarde nos dirigimos a los vehículos y volvimos al colegio, el lugar de donde vinimos, era la una de la tarde cuando llegamos y nos dirigimos a nuestras casas. En definitiva, aunque las expectativas sobre este recorrido fuesen tan bajas, fue una buena experiencia.

Fuente: www.parquearvi.org

Fuente: www.parquearvi.org